En Sants y Les Corts, Barcelona, encontramos la mejor obra nueva

El mercado inmobiliario desde 2014 se ha vuelto a reactivar. Ya pasaron los peores años de la crisis y vemos signos de recuperación en la economía, empezando por el sector inmobiliario, tanto en alquileres como en venta de viviendas; incluso están aumentando las promociones de obra nueva en las grandes ciudades españolas.

Como caso paradigmático, tomaremos la ciudad de Barcelona como ejemplo: en Sants y Les Corts tienen la mejor obra nueva del mercado. En estos barrios del centro de la ciudad vemos como se han construido nuevos edificios y ya se están comercializando pisos de 1,2, 3 y hasta 4 habitaciones.

La oferta inmobiliaria se adapta a las necesidades de los ciudadanos, y como vemos, los pisos de obra nueva céntricos y situados en barrios tradicionales, siguen atrayendo a los compradores de todas las edades. Las promotoras se adaptan a los cambios y construyen viviendas para singles, familias monoparentales o tradicionales.

Las preferencias de los compradores siguen siendo las mismas que antes de la crisis: pisos luminosos, exteriores y, a poder ser, con terraza, plaza de parking y trastero; y que cuenten con áreas de recreo y zonas verdes, incluso con piscina. Además, está muy valorado que estén cerca de zonas comerciales.

Como novedad en el sector, encontramos la posibilidad de personalizar las viviendas. Se trata de poder adaptar el espacio y los acabados a las preferencias y necesidades de los futuros inquilinos. Los denominados pisos a medida se presentan como la mejor opción para disfrutar de la vivienda perfecta. Los cambios más demandados son: ampliaciones de la cocina, dormitorios tipo suite y los acabados a la carta en los baños. Múltiples opciones de interiorismo para adaptarnos al estilo de vida de cada familia o habitante.

Una vez más, vemos como el mercado inmobiliario se adapta a los cambios y demandas de la sociedad con obra nueva de calidad, y mientras la economía siga creciendo a buen ritmo, continuaremos observando como en zonas urbanas, que las grúas y los operarios vuelven a formar parte del ambiente cotidiano.