Debería saber que el consumo de carne roja tiene sus riesgos
Sólo porque soy un defensor de la carne vacuna por su contenido rico en proteínas, no significa que no reconozca los riesgos asociados al consumo de carne roja. De hecho, yo tomo como un deber el tratar de presentar cualquier tipo de prueba de investigación que muestre los riesgos asociados a este estilo de vida.
Por eso quiero mencionar cuidadosamente un nuevo estudio del Instituto Nacional del Cáncer que muestra un cambio alarmante en los índices de mortalidad asociados con el consumo regular de carne roja. Se demostró que el consumo regular de carne roja por sí solo es suficiente para aumentar el riesgo de muerte por cualquier causa.
Información sobre el consumo de carne
Aquellos que consumían una mayor proporción de carne blanca de hecho tenían menos riesgo de muerte, en particular de cáncer. Este estudio abarcó a más de 500.000 personas y fue parte de la NIH-AARP Diet and Health Study.
Un análisis más detallado por parte del estudio reveló que el 20% con el mayor consumo de carne roja eran los de mayor riesgo de muerte por cualquier causa, mientras que el 20% con el menor consumo de carne roja tenían el menor riesgo de mortalidad general. Un resultado más sorprendente puede ser que el 20% con el mayor consumo de carnes blancas tenían un riesgo ligeramente menor de muerte por todas las causas que el 20% con el menor consumo de carnes blancas.
En cuanto al aumento de casos de cáncer entre los consumidores de carne roja, se postula que cocinar la carne roja a elevadas temperaturas puede ser por lo menos parcialmente responsable del aumento en el cáncer mediante la transmisión de agentes cancerígenos a los que comen carne roja.
Otra parte de la ecuación puede ser la alta carga de grasa saturada que tiende a acompañar a la carne roja. Se sabe que los altos niveles de consumo de grasas saturadas están relacionados con tasas más altas de cáncer de mama y cáncer colorrectal.
Entonces, ¿cuál es la conclusión? ¿Qué nos dice este estudio? Una pregunta aún mejor podría ser, «¿qué falta en este estudio?». Por ejemplo, no sabemos si los que consumían más carne podrían haber estado haciéndolo en lugar de comer varias porciones diarias de frutas y verduras. Sabemos que el consumo diario de frutas y hortalizas reduce su riesgo de muerte por la mayoría de las causas.
Además, no sabemos si las personas estudiadas estaban comiendo carne roja con grasa o cortes magros. Por supuesto, no podemos saber a ciencia cierta lo que un estudio aislado significa en este momento, pero sí sabemos que tenemos que comer muchas frutas y verduras al día y que debemos elegir comer sólo las porciones más magras de la carne roja.
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