Responsabilidad Social de las Empresas
De acuerdo con la definición de la Comisión Europea, en su Libro Verde: Fomentar un marco europeo para la responsabilidad social de las empresas, publicado en 2001 [1], la Responsabilidad Social Empresarial (rse) “…es la integración voluntaria, por parte de las empresas, de las preocupaciones sociales y medioambientales en sus operaciones comerciales y sus relaciones con sus interlocutores”… “Ser socialmente responsable no significa cumplir plenamente las obligaciones jurídicas, sino también ir más allá de su cumplimiento invirtiendo “más” en el capital humano, el entorno y las relaciones con sus interlocutores”.
La responsabilidad Social empresarial (rse) se considera para más del 50% de las grandes empresas del mundo como algo estratégico.
Existen muchas maneras para realizar una rse y entre las posibilidades que puede aplicar una empresa están la limitación de los productos contaminantes, siendo más comprometida la empresa con el medio ambiente, crear las condiciones de trabajo adecuadas o elaboración de productos donde los trabajadores estén integrados sea el caso de trabajadores con algún tipo de minusvalía, no utilizando niños para abaratar el producto. El cuidar este tipo de situaciones hace perder dinero al empresario o por lo menos no ganar, son las quejas que ellos mismos suelen formular. En muchos estudios realizados por diferentes universidades la responsabilidad social corporativa incrementa el valor de la empresa, incluso son capaces de afirmar que bien gestionada aumenta la rentabilidad a largo plazo.
Las empresas que cuidan su Responsabilidad Social Corporativa (rsc) aumentan su valor. También se puede afirmar que el dinero de los inversores va ir a parar a empresas que son capaces de comprometerse con la sociedad, con el medio ambiente con personas no integradas en la sociedad, sea el caso de personas con riesgo de exclusión social, caso de minusválidos, mujeres maltratadas, inmigrantes……
Hay empresas que tienden a irse a países en vía de desarrollo donde no se reconoce la rsc. No es una buena idea para las empresas comprometidas con su responsabilidad social. Los efectos externos a la empresa, como el medio ambiente, las políticas sociales o el trabajo infantil, la no integración de personas en riesgo de exclusión, personas con minusvalía, repercuten directamente sobre su valor. Muchos inversores se dan cuenta que este tipo de empresas generan rentabilidad hoy, pero no crearán valor en el futuro.