La inmensidad de Roma adaptada a tu bolsillo
Roma no es la típica capital europea ni la más cosmopolita de las ciudades italianas. Sin embargo, pocas concentran al gran número de visitantes que recibe ésta y que luchan por abrirse paso entre sus muestras de la historia occidental.
En la ciudad de las siete colinas conviven edificaciones romanas y arte renacentista con una pizza de masa fina y los giros lingüísticos italianos del siglo XXI. Una mezcla muy atractiva al parecer para los turistas de “guía-pinganillo” que no distinguen de temporada alta o baja consabidos de la alta inversión que se les irá entre caminata y caminata.
Roma ofrece más posibilidades que los itinerarios que marcan los paquetes vacaciones o los propios romanos adaptados a un nivel medio/alto de vida. Los caminos secundarios abundan y no es difícil dar con ellos si nos decantamos por la alternativa al recorrido “oficial”. Ya desde la llegada podemos tomar el bus o el cercanías en lugar de llegar a la ciudad en taxi (unos 30€ desde A. Ciampino) o en el tren Leonardo Express (11€ desde A. Fuimicino).
Una vez allí, el mayor gasto suele ser el alojamiento y, si sabemos elegir, el mayor ahorro. Cuanto más céntrico más caro y lujoso, y si la intención es únicamente tener un lugar para dormir lo más acertado será centrarse en el radio entre Via Cavour y la Estación central de trenes Termini. Basta alejarse un par de paradas de metro de los puntos más turísticos para que los precios desciendan y surjan las opciones. Los hostales Roma (“ostello” en italiano) son la mejor alternativa, jovial y económica, si no importa compartir baño y habitación.
Otras alternativas son las muy económicas Casas Religiosas, para peregrinos, o los campings, para los más aventureros. Suelen ser más estrictas en los horarios, las primeras, o estar a las afueras de la ciudad, los segundos. En cualquier caso, todo depende de las necesidades del viajero y no hay que olvidar que Roma cuenta con una amplia red de autobuses que funcionan toda la noche y cuyo intercambiador está frente a Termini.
Es muy útil comparar en los directorios de búsqueda de hostales los servicios que ofrecen los hospedajes, su fecha de construcción, si aceptan tarjeta de crédito o si hacen descuentos con el carnet de alberguista. Un breve estudio comparativo calidad/precio nos ayudará a tomar la mejor decisión. Las cadenas de hostales Inn o Youth Hostels, por ejemplo, son muy fiables. Es aconsejable reservar con antelación aunque en las oficinas de turismo pueden ayudarnos a buscar un lugar donde pernoctar, eso sí, dispondremos de menos opciones.
Roma es un gran museo al aire libre. Merece la pena caminar para conocer las principales localizaciones, pero no está de más hacer uso del bono turístico de metro-bus (4€ por día hasta las 24h). Llegaremos fácilmente a lugares más alejados como el barrio del Trastevere, el Vaticano o las zonas menos expuestas al turismo como el barrio de San Lorenzo o el barrio Judío. Será en estas zonas donde podamos desayunar el clásico capuccino y “cornetto” a bajo precio o disfrutar de sabrosos “trancio” de pizzas y degustarlos en placitas acogedoras.
Sin embargo, ¿quién no quiere ver las obras de Miguel Angel o el Coliseo?. Para reducir el coste de estas inevitables “turistadas”, que en muchos casos superan los 10€, es importante que lleguemos a Italia con el Carnet Joven Europeo. También se puede solicitar en los principales monumentos la “Carta Archeologica”, que reduce el precio de siete monumentos a elegir según el itinerario.
Con la misma intención, podemos empezar la mañana con una visita a los mercados tradicionales de comida, como el de Piazza dell’Unitá (Risorgimento). Allí encontraremos lo indispensable para preparar un picnic para el almuerzo y evitaremos perdernos por las calles en busca de una “trattoria” barata.
Para el final de la jornada las alternativas son muchas, pero caras. Si no llevamos en la mochila nuestras mejores galas o no queremos gastar lo ahorrado nos debemos olvidar del ritmo nocturno del centro. Quizás, la opción que más convenga sea pasar un rato por los llamados “centro socialli” (como Forte Prenestino o Villagio Globale), iniciados en su momento por el movimiento okupa y que actualmente son una de las mayores fuentes de conciertos y exposiciones gratuitas de la ciudad.
By: Sony Lopez
Sonia, Andrea y Almudena, son viajeras independientes que, antes de trabajar como escritoras para HostelBookers recorrieron varios continentes descubriendo las maravillas de sus ciudades y pueblos. En su estancia en España descubrieron hostales de calidad y económicos donde alojarse.