Dejar de fumar para siempre con ayuda dietética

Dejar de fumar es algo muy serio. No es algo que se pueda tomar a la ligera. Debido a esto, un fumador que desee dejar su hábito, necesitará todo tipo de apoyo que se le preste. Gracias a testimonios de ex fumadores y otras investigaciones, se ha llegado a la conclusión de que la dieta juega un papel crucial para dejar de fumar de una forma más exitosa y soportable.

El camino para dejar de fumar

Si no puedes superar tu síndrome de abstinencia, prepárate para conseguirlo. Aquí es donde la dieta juega un papel fundamental. Un estudio de la Universidad Duke descubrió que las verduras, las comidas lácteas y la fruta hacían que el sabor del cigarrillo fuese desagradable. Sin embargo, el café, las bebidas alcohólicas y la carne hacían que fuese mucho más agradable. Una persona que asocie los cigarros con los últimos productos mencionados, debería seguir los consejos aquí mencionados.

Hay algunos que logran un mayor éxito si lo dejan por unos pocos días y se desintoxican con la ayuda de un ayuno de frutas. Diferentes médicos opinan que esto ayuda al cuerpo de la persona a limpiarse de la nicótica y toxinas. Estas dos son las responsables de que sea tan duro dejar el tabaco.

La alimentación para ayudar a dejar de fumar

Una forma de empezar a esforzarse por dejar de fumar es tomar una gran cantidad de frutas y verduras. Estas comidas son ricas en minerales, fibras y vitaminas. Proporcionan al cuerpo una nutrición adecuada, eliminando la nicótica y mejorando el ánimo del fumador, un ingrediente clave para dejar de fumar.

El objetivo será un consumo mínimo de 20 gramos de fibra diarios. No olvides beber gran cantidad de agua, al menos ocho vasos diarios. Esto ayuda a que el cuerpo expulse la nicotina. Evita el alcohol como la mayoría de los fumadores que intentan calmar sus ansias. Una forma de hacer que el agua sea más ‘atractiva’, es añadir un poco de zumo de naranja o de limón.

También es bueno comer alimentos con mucho calcio como el pescado o los productos lácteos bajos en grasas. Satisface las necesidades de hierro de tu cuerpo tomando espinacas, cereales fortalecidos o carne baja en grasas – todos estos alimentos contribuyen a buenos niveles de energía. Para las personas que pican demasiado, pueden probar tomar un vaso de agua media hora antes de las comidas para aliviar la sed y los retorcijones de hambre entre las comidas.

Aun así, uno no debe privarse de sus comidas preferidas. Disfrútalas, pero con moderación. Empieza la comida igual que la cena, con una gran ensalada llena de nutrientes para el cuerpo y que te frene de comer demasiados alimentos altos en grasas y calorías. Además de mantener una dieta sana, el ejercicio es una excelente forma de desahogarse y quemar calorías.

Siempre se dará un malestar en el momento inicial de dejar de fumar, pero lo que importa es el hecho de que la persona ha realizado un intento consciente de empezar a vivir de una forma más sana. Tampoco estará de más darte una palmadita de apoyo en la espalada cada día que hayas superado con éxito tu reto.

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