Toda crisis es una oportunidad
Si como dicen los orientales las crisis son épocas de oportunidades, entonces nadie podrá negar que estamos pasando por una tremenda oportunidad. Claro está que en nuestro país es difícil recordar un momento histórico en el que no se haya mencionado la palabra crisis, por lo cual podríamos decir que nos mantenemos en un estado permanente de oportunidades. Suena muy bonito eso de las oportunidades, suena muy fácil, pero no lo es.
Aprender a ver más allá en medio de la desesperanza y el pesimismo, propios de éstas situaciones, es realmente difícil. Las ideas nuevas necesitan alguien que las alimente mientras cogen vuelo y muy pocos están dispuestos a sacrificar lo poco que tienen en pos de un resultado incierto, pues si algo es seguro en el mundo de los negocios es que nada es seguro, ni los expertos en pronósticos del tiempo son capaces de predecir con exactitud el clima más allá de tres días, mucho menos vamos a saber nosotros como van a reaccionar nuestros clientes en un futuro próximo. Sinembargo el mundo del mercadeo esta lleno de ideas que surgieron a partir de una fuerte crisis y transformaron el mundo para siempre. Por ejemplo los mayores avances en el sector automotriz se dieron después de las crisis petroleras pues obligaron a los ingenieros a desarrollar motores de combustión que optimizaran el uso del combustible.
La estrategia más común por estos días es bajar los precios. Por todas partes se ven letreros de descuentos, rebajas y liquidaciones ¿Funciona? en el corto plazo sí, y en el largo cosecha una nueva crisis pues cada vez son menores los recursos para reactivar el negocio y los clientes se acostumbran a que se les valore con rebajas. Esto es pan de cada día en nuestro medio. Tal vez por eso la crisis se veía venir y no es otra cosa que la consecuencia de nuestras decisiones pasadas.
¿Qué podemos hacer? La mayoría de las veces la crisis se representan en una actitud miedosa. Los clientes no dan porque Usted tiene miedo de darles y viceversa, así que alguien debe dar el primer paso. Puede ser Usted si decide no seguir esperando. Entonces tome riesgos calculados, innove, invierta, haga publicidad. Verá que uno a uno, poco a poco, tienda a tienda el cielo se va despejando. Hace más quién enciende una vela que quién maldice la oscuridad.
Fuente: Naranjo Publicidad