La fórmula simple para la pérdida de peso: ¡comer menos calorías y hacer más ejercicio!
El mundo de la dieta puede ser muy confuso. Hay docenas y docenas de dietas disponibles: la dieta Atkins (baja en carbohidratos, alta en grasas), la dieta Dean Ornish (baja en grasas, alta en carbohidratos), y la dieta South Beach, por nombrar unas pocas. Con tantas opciones, puede ser difícil determinar qué dieta es la mejor y la más eficaz.
Pero eso era antes, gracias a un reciente estudio publicado en el New England Journal of Medicine. En un estudio reciente sobre las dietas de pérdida de peso que implicaban el consumo de diferentes cantidades de hidratos de carbono, proteínas y grasas, el equipo de investigadores parece haber encontrado la respuesta: las cantidades de carbohidratos, proteínas y grasas en realidad no hacen ninguna diferencia.
Calorías adentro, calorías afuera
La conclusión es que la pérdida de peso todavía se trata de alcanzar el equilibrio entre las calorías que entran y las calorías que salen. Comer menos alimentos, sin importar si se trata de pan, aceite o carne de res, a la larga conducirá a la pérdida de peso. Los científicos también descubrieron que si usted se apega a una dieta especial durante aproximadamente 6 meses, es menos probable que cumpla su objetivo de cantidades de carbohidratos, proteínas o grasas. Esto no importa, sin embargo, siempre y cuando las calorías se mantengan bajas.
¿Qué hace que la pérdida de peso sea exitosa?
Los investigadores también descubrieron que aquellos que tuvieron éxito en la dieta se tomaron el tiempo para asistir a sesiones de grupo. De hecho, su pérdida de peso parece estar en proporción directa con su asistencia a sesiones de grupo: a cuantas más sesiones de grupo asistieron, más peso perdieron.
Otra observación es que la mayoría de las personas que hacen dieta comienzan a ganar esas libras nuevamente después de su pérdida de peso inicial, y que al cabo de dos años habrán perdido alrededor de 9 libras. Lo que esto nos dice es que tenemos que chequear constantemente nuestro peso con el fin de asegurarnos de no agregar más kilos. Esto se trata de pesarse a diario y realizar un seguimiento de cómo le queda la ropa.
Además, el estudio dice que no podemos detener el hambre con un determinado alimento. Tal comida mágica no existe. Esto se debe a que las personas que hacen dieta tienden a sentirse satisfechos con el plan de pérdida de peso que se les asigna. Además, no se notó una diferencia en la saciedad o el hambre observada entre los grupos.
Sin embargo, las observaciones señaladas en el estudio no son exactamente ciertas para todas las personas. Cuando algunos individuos comen alimentos con alto contenido en proteínas, se sienten satisfechos durante mucho más tiempo, así que comen mucho menos en comparación con cuando comen alimentos ricos en hidratos de carbono. El ejercicio también juega un papel importante en la pérdida de peso o en mantenerse delgado.
Otra manera de perder peso es ayudandose con pastillas para adelgazar, pero de todas maneras hay que llevar una dieta.