Un City Tour por Mendoza capital
La ciudad de Mendoza no es sólo un punto de partida para excursionar por bodegas o escalar montañas. Nadie debe dejar esta provincia sin haber dedicado por lo menos una tarde a sondear sus rincones, sorpresas y recovecos. Ser parte de un City Tour que nos guíe por los principales centro de interés de esta coqueta ciudad es muy sencillo: en los principales hoteles en Mendoza capital sabrán informarnos sobre las mejores opciones para recorrerla sin perdernos nada.
Formar parte de un City Tour que nos guíe por los principales centro de interés de la coqueta ciudad cuyana resulta sencillo: en los principales hoteles en Mendoza capital sabrán asesorarnos sobre las mejores opciones para recorrerla sin perdernos nada.
Los paseos más completos por la ciudad suelen comenzar recorriendo el área fundacional. La plaza Pedro del Castillo, bautizada en honor al fundador de Mendoza, tiene a su alrededor la mayor parte de los edificios históricos de la zona. Allí están las Ruinas de San Francisco, recuerdo de la que fuera la Catedral de la ciudad hasta su destrucción durante el devastador terremoto de 1861. Visitarla es trasladarse mágicamente a otro tiempo, cuando la provincia y la patria toda comenzaban a crecer y a forjar poco a poco su identidad.
Al otro lado de la plaza aguarda el Museo de Área fundacional, que salvaguarda en su interior restos de algunas de las construcciones alrededor de las que giraba, hace ya mucho tiempo, la vida en la ciudad: el antiguo cabildo, el matadero y la cámara subterránea cuyas fuentes proveían de agua a la población de la capital.
Desde allí, las excursiones van generalmente hacia el Parque General San Martín, uno de los centros actuales de la vida en la ciudad. Por el camino, vale la pena observar los pequeños detalles que hacen de Mendoza una ciudad planificada para enfrentar con éxito los temblores de tierra: la abundancia de plazas, el inusual ancho de las veredas y la particular distribución de las avenidas.
En el Parque San Martín, la temperatura es en promedio 4 grados menor que en el resto de la capital, de allí que sea el lugar preferido por sus habitantes para la práctica de deportes, los paseos en familia o, meramente, para refrescarse en las sofocantes noches de verano, un ritual típicamente mendocino que suele prolongarse hasta altas horas de la madrugada. El Cerro de la Gloria, con sus 960 mts de altura, custodia el parque. En su cima, el imponente Monumento al Ejército de los Andes y la no menos imponente vista panorámica de la ciudad coronan el city tour. Otra experiencia imperdible del turismo en Mendoza.
Jorge Alberto Guiñazu