Qué es la colonia
La colonia, o agua de colonia, para llamarlo más correctamente, es un producto creado en base a esencias presentadas en forma de solución. Es decir, las esencias, de carácter sólido o líquido, se diluyen en un solvente, que suele ser, en el caso de las colonias, una mezcla de agua destilada y alcohol etílico o etanol.
Justamente, esta es una de las diferencias más importantes que la colonia sostiene con el perfume: su concentración. En la colonia, la concentración de aceites esenciales, químicamente llamados solutos, varía entre un cinco y un diez porciento. Además, el agua de colonia es una denominación registrada como la marca de perfumes más antiguas del planeta. Las primeras fórmulas de la colonia datan del año 1709, de la mano del perfumista J. M. Farina. Esta primer variedad, que aún se elabora según la fórmula original creada hace casi 320 años, era conocida como “Farina Aqua Mirabilis”, el agua milagrosa de Farina. Esta tradicional colonia se elabora en base a aceites esenciales de limón (citronela), naranja, bergamota, mandarina, lima, cedro, pomelo y un bouquet de hierbas que se mantiene en secreto. Su propio creador diría de su colonia: “He descubierto un perfume que me hace recordar a un amanecer italiano, a narcisos de montaña, a azahares de naranjo justo después de la lluvia. Él me refresca y refuerza mis sentidos y mi fantasía”, según reza en una epístola dirigida a su hermano Bautista en 1708.
La colonia es el complemento ideal para el atuendo diario. Es casi imposible que una persona que cuide su apariencia salga por la mañana sin ponerse al menos unas gotas de esa colonia que la hace tan particular. Si hasta los bebés disponen de productos elaborados para la más tierna infancia. En este caso, las colonias para bebés suelen ser menos agresivas que las colonias para adultos, en lo que hace a su fragancia, y tienen una concentración de etanol menor. No conviene aplicar colonias para adultos en bebes muy pequeños. No todos los productos son hipoalergénicos, es decir inocuos para la delicada piel de la criatura, y corremos el riego de provocar un edema, o una seria reacción alérgica.
Pocos productos son tan universales como la colonia, que ya se ha hecho carne en la humanidad, atravesando todos los usos culturales por igual. La creación de la colonia ha sido un hito que marcó la historia de la humanidad para siempre, haciendo de este mundo un mejor lugar, desde hace más de tres siglos.