Las Milongas de Buenos Aires, Catedrales del Tango

En tu próximo viaje a Buenos Aires no dejes de visitar estos locales donde se baila, se escucha y se siente la pasión del Tango

Una de las salidas obligadas para todo turista que visita la ciudad de Buenos Aires por primera vez es asistir a un show de tango. Aunque estos espectáculos dignos de Broadway imprimen en la memoria del visitante un recuerdo poderoso e imborrable, la verdadera esencia del tango habrá que buscarla en las “Milongas”.

Las “Milongas” son locales nocturnos donde porteños y amantes del tango de todo el mundo se dan cita para bailar tango, escuchar música en vivo, tomar lecciones de baile, sociabilizar y mantener viva la llama de una de las pasiones musicales más intensas de nuestro tiempo. Son un híbrido entre una discoteca, un club social, un cabaret de variedades y un bar, pero el resultado es mucho más que eso.

Se trata de verdaderas Catedrales del Tango, espacios donde se conservan, se transmiten y metamorfosean las tradiciones más íntimas de esta honda manifestación de la cultura popular argentina. He aquí algunas dos Milongas fuera del “circuito oficial” que no puedes dejar de visitar durante tu viaje a Buenos Aires:

Milonga La Catedral

Imagínate entrar a una antigua fábrica decorada desde el piso hasta el techo por objetos de arte hechos con desechos, mesas de todo tipo iluminadas por velas, sillas destartaladas estrictamente desiguales entre sí y una pista de baile de madera coronada por pequeñas luces rojas donde se abrazan bailarines de tango de todo el mundo. Eso es La Catedral y mucho más, un lugar mágico donde todo puede pasar, como asistir a una improvisación de tango en vivo, ver pulular gatos entre los bailarines o quedar literalmente boquiabierto ante una pareja de japoneses que parecen haber descubierto todos los secretos del tango. Aunque abre los fines de semana, el martes es el día clave para zambullirse en esta bizarra, poética e imprescindible Milonga. Puristas abstenerse.

Milonga al Aire Libre de la Plaza Dorrego

Si la Feria de Antigüedades de la Plaza Dorrego es uno de los paseos donde más se respira tango los domingos, durante las noches se convierte en una de las milongas más populares de la ciudad. La Milonga tiene lugar en la plaza misma, donde se instala un piso especial bajo los árboles y una guirnalda de luces de colores. La noche comienza con tango y sigue con folklore argentino, salsa y otros ritmos populares. Es el lugar perfecto para pasar una noche de verano con amigos, bailar o simplemente disfrutar del arte de bailarines de tango profesionales, amateurs y principiantes, todos juntos con la sola intención de pasar una noche de tango como en el patio de una casa.

Una de las mejores ocasiones del año para disfrutar del tango y las milongas de Buenos Aires es durante el Mundial de Tango, cuando la mayoría de las milongas presentan shows y eventos especiales. Durante este evento que trastoca literalmente toda la ciudad, los hoteles en Buenos Aires suelen estar completos, por lo que es recomendable que planifiques tu visita unos meses antes.