El diagnóstico tardío de la Dislexia en Adultos: ¿Existe todavía esperanza?

La dislexia es una dificultad del aprendizaje que afecta a personas de todas las edades. Al igual que con otras discapacidades, la detección y la intervención temprana son fundamentales para la persona con esta alteración perceptiva. Sin embargo, esto no siempre es posible en el caso de la dislexia.

Un Principio pasado por alto

La mayoría de las veces, en la niñez, la dislexia se pasa por alto, y esta es la razón por la cual existen un montón de casos diagnosticados en la edad adulta. Normalmente, tanto los profesores y padres, cuando se encuentran con un niño que no ha aprendido a leer con fluidez a la edad de diez u once años, suelen pensar que carecen de la motivación o la inteligencia necesaria para realizar esta actividad.

Mucha gente puede pensar que son “lentos”, despistados o perezosos. Sin embargo, en la mayoría de los casos, no son ninguna de las dos cosas. Lo más probable es que tengan dislexia, un problema de percepción y aprendizaje que  dificulta la comprensión y redacción del lenguaje escrito, a pesar de que tengan una inteligencia normal o incluso superior a lo normal.

Cableado defectuoso y Detección Temprana

Los estudios más recientes muestran que las dificultades en la lectura que  experimentan las personas con dislexia se deben a un «fallo eléctrico» en áreas específicas del cerebro que tienen una relación con el aprendizaje y el lenguaje. La investigación también muestra que las variaciones o defectos genéticos son la causa parcial de este cableado defectuoso.

El análisis precoz y la detección de estas variaciones hacen posible que se pueda buscar y disponer de la intervención psicopedagógica adecuada y oportuna. La mayoría de los expertos sugieren que los niños deben poder hacer frente a su condición de disléxico para poder superarla y por lo menos aprender a leer a un nivel aceptable. Sin embargo, considerando que la dislexia muchas veces sólo se diagnostica en la edad adulta, los beneficios de la detección precoz no se maximizan.

Detección de última hora

Aunque hay personas que sólo son disléxicos durante su edad adulta, debido a una lesión cerebral traumática o accidente cerebrovascular, en la mayoría de los casos la condición está presente debido a un trastorno del desarrollo. Según los expertos, aún, la mayoría de los casos registrados de personas con dislexia son adultos que la han padecido desde la infancia, pero sólo han sabido lo que era cuando ya eran adultos.

Este diagnóstico tardío es algo que ocasiona muchos problemas a la mayoría de adultos disléxicos. Sin embargo, si se es diagnosticado a la edad adulta, no hay razón para estar preocupado. La intervención psicopedagógica, no importa lo temprano o tarde que se realice, sigue siendo una intervención, a pesar de que pueda tener diversos efectos dependiendo de la edad del sujeto intervenido.

El tema de la plasticidad del cerebro

La detección tardía se convierte en un problema debido a la condición de plasticidad del cerebro. La investigación muestra que los animales y humanos más jóvenes suelen tener un cerebro más adaptable que los individuos de más edad. Así, la relevancia que se le da a la plasticidad del cerebro es porque es un factor importante en relación a la intervención.

Como el cerebro es más plástico cuando se es más joven, el cableado y re-cableado del cerebro es entonces posible, ya que no ha llegado a su madurez y sigue desarrollándose. Por lo tanto, si alguna vez un problema de aprendizaje como la dislexia está presente, el cerebro todavía puede ser re-diseñado para funcionar en un nivel más aceptable, cuando la condición de dislexia tiene un efecto mínimo.

Una gran cantidad de adultos recientemente diagnosticados con dislexia manifiestan temor a que la intervención no les haga ningún bien, simplemente porque su cerebro no es tan plástico  como el de los niños. Sin embargo, estudios recientes muestran que la propiedad del cerebro de poder realizar cambios aún está presente, incluso en la adultez.

Este reciente hallazgo en la plasticidad en el cerebro adulto es un gran avance para aquellos adultos disléxicos. Así que aquel adulto que haya recibido un diagnóstico tardío, debe saber que ¡todavía hay esperanza para que pueda mejorar con la intervención apropiada!

Jenny Guerra

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