El oscuro encanto de un perfume memorable
La tradicional casa parisina Stendhal es referente mundial en maquillajes y cosméticos de la más alta gama. Conocida por su exclusividad, calidad y refinamiento, Stendhal ha elegido permanecer deliberadamente como una contraseña para pocos, con una selectiva estrategia de difusión que incluye pocos puntos de venta y atención personalizada a sus fieles seguidores. Es por eso que, hasta hoy, la firma no comercializaba perfume alguno. Tal vez, se encontraba abocada a la minuciosa creación de una fragancia que estuviese a la altura de su tradición de lujo y refinamiento extremos. Hoy, esa fragancia existe. Su nombre: Elixir Noir.
Ya desde su envase, el primer perfume de Stendhal nos transporta mágicamente a otro mundo. Su frasco nos invita a viajar al pasado, como fiel réplica que es de los antiguos y macizos perfumeros habituales en el tocador de las abuelas.
La fragancia, por su parte, promete fundirse con la piel hasta convertirse en el sello personal de quien la usa. Stendhal se ha propuesto hacer de Elixir Noir un auténtico himno a la femineidad y el lujo con un sugerente toque de misterio. Sus notas de salida sorprenden con una inusual combinación de arándano, pimienta roja y hojas de magnolia. El corazón es una oda a la flor misteriosa, sofisticada y sensual por excelencia: la orquídea. Esta magnífica creación de Emilie Copperman, responsable, entre otras, de las fragancias de Kate Moss y Van Cleef & Arpels gira en torno a una variedad muy especial, la orquídea Sharry Berry. Esta flor cuenta con la particularidad de una fragancia similar a la de un helado de chocolate y vainilla. En el corazón de Elixir Noir, la poderosa orquídea Sharry Berry se impone arropada por acentos de fresia y gardenia. La base de la fragancia, compuesta de sugestivas y sensuales notas de patchouli, musk y maderas de amyris, redondea una composición verdaderamente única.
Quienes lo prueban en la piel caen inmediatamente seducidos por la cremosa, sensual y envolvente personalidad de este perfume. Una fragancia que mantiene su carácter con el correr de las horas, sin resignar sus notas distintivas ni su particular y delicado encanto.
Completan la línea Elixir Noir el gel de ducha, la loción corporal hidratante y el spray desodorante.
Stendhal verdaderamente ha conseguido estar a la altura de las expectativas generadas por el lanzamiento de su primera fragancia: Elixir Noir promete despertar en las amantes de la sofisticación y el lujo la misma adicción que sus célebres cosméticos.